HOMENAJE A LOS VALORES DE YAMAHA

  • Introduction to the exhibition honoring the 40th anniversary of Sanglas 400 motorcycle.

    Published in 2021.

  • This commission is only available in Spanish.

El pasado mes de noviembre se cumplieron 40 años de la adquisición de Sanglas, una de las primeras marcas españolas de fabricación de motocicletas nacida en Barcelona en 1942. Para Yamaha, cuya sede española ha estado situada en la capital catalana desde entonces, la absorción de esta empresa creada a partir del esfuerzo de dos hermanos estudiantes de ingeniería, supuso la entrada al mercado español y el nacimiento de una nueva familia alrededor de los valores transmitidos por el entonces presidente de la compañía, Genichi Kawakami (Japón, 1919-2002).

Impulsor de la creación de Yamaha Motor Co. Ltd., fue bajo la dirección de Kawakami cuando la fabricación de motocicletas entró en la compañía como nueva línea de negocio. Audaz como pocos, Kawakami estaba decidido a crear una motocicleta que aportase un valor al mercado existente. Su deseo era crear algo nuevo y exclusivo sin renunciar a valores como la honestidad y el esfuerzo. 

Yamaha adquirió Sanglas en 1981 cuando la empresa catalana contaba con escasos recursos para hacer frente a la innovación que el mercado reclamaba en ese momento y a pesar de su consolidación tras el éxito del modelo SANGLAS 400. Clave en la pedagogía de la sociedad española con respecto al uso de la motocicleta, treinta años después de su fundación, a Sanglas quedaban más deberes y obligaciones que satisfacciones.  

“Camina con tus predecesores y forja el futuro con tus compañeros de todo el mundo”, fue una de las consignas que el Sr.Kawakami dejó escrita en la historia de Yamaha. La tradición, la identidad y el respeto son los fundamentos del camino recorrido por Yamaha en sus casi 70 años de historia y continúa muy presente en la Global Yamaha Motor Group. 

El cuarenta aniversario de la  adquisición de Sanglas supone un homenaje a dichos valores y una efeméride que nos invita a echar la vista atrás y observar en el camino recorrido hasta llegar a un presente de consolidación de nuestra marca en torno a los principios que se dan encuentro en lo que hoy llamamos The Global Yamaha Way.